“Estamos sumamente consternados, lo que sucedió hoy nos toca muy de cerca porque ese miedo de morir lejos de tu familia o fuera de tu país, es un sentimiento que cualquier ser humano teme sufrir”, dijo acongojada la presidenta de la Agrupación de Venezolanos en la Patagonia Chilena, Geraldine Pérez, ante la muerte que Jefferson Sánchez Quinteros (24) encontró a la altura del kilómetro 140 de la Ruta 9 Norte, producto de la colisión entre el transporte de la empresa Bus Sur -para la que trabajaba como auxiliar- que viajaba desde Puerto Natales a Punta Arenas y un tracto camión sin acoplado que transitaba en sentido contrario.
Para la representante de esta comunidad, aún no es posible asimilar la partida del infortunado joven, quien llegó a la región hace un año y medio procedente de Mérida -ciudad andina del noroeste de Venezuela-, con la idea de establecerse en Punta Arenas, ciudad que le gustó desde un principio y donde encontró trabajo, precisamente en Bus Sur.
«Con este empleo más el apoyo de su pareja, también venezolana, estaba logrando estabilizarse bien y de ese modo, podía tener los recursos para ayudar a sus padres a la distancia. Ahora con esta tragedia, se está tratando de ver cómo hacer para que puedan llegar a tiempo a Chile a ver su hijo, ya que los tiempos del Servicio Médico Legal son de 48 horas para estos casos y eso significa que estamos contrarreloj».
Por lo mismo, «estamos gestionando a nivel de embajada, las opciones necesarias para que podamos tener a su familia acá cuanto antes. Esto nos ha llegado muy fuerte y de seguro va a ser un velatorio muy sentido, con banderas y donde quisiéramos cantarle nuestro himno nacional».