“Cuando me dijo que se quería venir a Punta Arenas lo recibí feliz, porque tendría la oportunidad de seguir saliendo adelante en sus cosas. Era muy alegre, donde iba estaba la talla a flor de piel, hizo muchos amigos y es impresionante la cantidad de gente que vino a verlo en su despedida final, acá donde lo estamos velando (población Cardenal Silva Henríquez)”.

Tales son los profundos sentimientos con los que Antonio Serón Contreras representa el gran cariño y dolor con que recuerda a su sobrino, Víctor Serón Nail, 32 años, conductor del camión de la empresa Kamke fallecido tras colisionar el sábado con una máquina de Bus Sur a la altura del kilómetro 140 de la Ruta 9 Norte, cerca de Morro Chico, donde también perdieron la vida dos ocupantes del bus de transportes, el chofer Juan Hernández Aguilar y el auxiliar Jefferson Sánchez Quintero.

Antonio Serón dice que lo ocurrido es un hecho muy difícil de asimilar, más aún cuando el día del accidente la última conversación con su sobrino fue cerca de las 13 horas. “El estaba en Punta Arenas y me acuerdo que primero lo llamé pasadas las 10 horas, me dijo que desenganchaba (el acoplado del camión) y se iba a cargar animales a Natales. Ahí me comentó que se iría directo a la frontera para estar tipo 18 horas en ese punto, quedarse a dormir allá para salir al otro día temprano hacia el norte del país”.

De hecho, esta era una de las principales tareas que realizaba Víctor con regularidad, dado que hace un tiempo se trasladó a la Décima Región para integrar las filas de la empresa Kamke -luego de 4 años desempeñándose en Buses Fernández-, dedicándose a partir de ahí a la realización de viajes entre Puerto Montt y Punta Arenas. “Llevaba unos dos meses y todo esto viene tan de golpe. Encima de todo, el próximo mes se iba a casar, esto es demasiado triste para todos nosotros”, dijo su tío aún desconsolado.

En cuanto a las condiciones del camino y la probabilidad de que haya sido la escarcha una de las razones por las que su sobrino perdió el control del camión, Antonio sostuvo: “Lamentablemente, para la escarcha no hay chofer lo suficientemente bueno, si te pilla el planchón y el vehículo es liviano de cola, o pesado adelante, no podrás maniobrarlo fácil”, señaló Antonio, quien vive en Punta Arenas desde hace 25 años.

Víctor se va, pero quedará su imagen en el recuerdo de su pareja, amigos y padres, como de sus tres hermanas y un hermano e hija de 13 años, la que vive con su abuela en Ancud, ciudad hasta la que serán trasladado hoy sus restos.

El malogrado chofer destacó desde temprana edad por su admiración hacia el Cuerpo de Bomberos de Ancud, donde fue voluntario, emulando los pasos de su padre, Víctor Enrique Serón Contreras.

Críticas a Vialidad

Para el transportista, Pedro Aguilar, aún cuando cada accidente tiene sus particularidades, en casos como éste, donde las condiciones de la ruta en invierno son determinantes, su visión es un tanto crítica por cómo se trata en general el estado de las rutas en invierno en la región. “Creo que hay un poco de despreocupación de Vialidad, porque ellos salen a regar sal y la verdad, es tarde y poco. Nosotros transitamos por carreteras argentinas que son tan complicadas como la de Natales y los camiones saleros están día y noche, incluso evitando que la escarcha se forme, porque ya cuando ésta ‘se instala’, por más sal que le eches, no hará efecto. Y en ese aspecto, cuando se trata de choferes profesionales que no son de la zona y la experiencia no es mucha en camiones dentro de nuestras rutas, un planchón pilla de sorpresa a cualquiera, porque no están acostumbrados. Cuando va sólo el tracto, acelerar o desacelerar es igual de peligroso, por lo que haces una mala maniobra y se te descontrola el camión. Acá sabemos dónde hay hielo y dónde no, pero quienes son de afuera no saben eso y suceden estos casos fortuitos”.

Escarcha negra

Por su parte, en cuanto al factor hielo, el jefe provincial de Vialidad, Mario Alvarez, indicó que si bien este tipo de hechos preocupa, la labor de esta unidad cuenta con una dedicación importante. “Todos los años nos dedicamos desde el 1 de junio hasta el 31 de agosto para tener dos sectores con gente apostada en la Ruta 9, que realizan vigilancia y esparcido de sal, todos los días de invierno a las 5 horas. Desde Magallanes, salen hasta el kilómetro 50 de la ruta y entran también a la internacional. En el puesto Nº103 tenemos otro equipo salero que baja hacia el límite provincial efectuando el esparcido”, puntualizó.

Alvarez agregó que “lo que está regando un camión, está en el orden de las 4 a 6 toneladas diarias y cada invierno se gastan hasta 600 toneladas. Ahora, muchas veces ocurre que tiras sal en la mañana y después de unas horas, la superficie queda húmeda y aparece lo que se llama ‘escarcha negra’, que son puntos específicos donde la temperatura del pavimento llega a varios grados bajo cero, solamente por acción del viento. Entonces, el manejar a una velocidad controlada es fundamental”.

En virtud de lo planteado, Alvarez dijo que se reforzarán los trabajos en aquellas áreas húmedas donde se presenta ese tipo de escarcha difícil de percibir a simple vista, que son meros planchones negros de escarcha, alguno de los cuales no se descarta pudo haber incidido en la colisión entre el camión y la máquina de la empresa Bus Sur. “Conversábamos de esto justamente, ya que estos cambios bruscos de temperatura se dan prácticamente desde el kilómetro 120 hasta el 150”, finalizó.

FuenteLa Prensa Austral
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