O’Higgins: “La Grandeza de un Hombre”

Por Antonio Yakcich Furche
Presidente del Instituto O’Higginiano de Rancagua

Los seres humanos que han marcado con sus acciones la historia de los países, no siempre han sabido cuando retirarse, abandonando la vida pública y dejando el camino libre a las nuevas generaciones.

O’Higgins en dicho sentido nos deja un ejemplo impresionante, primero por su abdicación y autoexilio, ambas manifestaciones de lo expresado, que demuestran su predisposición a abandonar el poder y en segundo lugar, cuando años más tarde ratificó rotundamente lo anterior.

En carta publicada en el Mercurio Peruano durante el año 1826, nuestro Padre de la Patria manifestó textualmente: “Bajo la sombra de mi viña y de mi higuera, libre del ruido de las armas y de las afanosas escenas de la vida pública….. Sin escuchar a ninguno, he determinado vivir contento de todo y dejarme conducir lentamente por la corriente de la vida hasta descansar con mis padres”.

Los hombres públicos como Bernardo, dejan como claro legado no solo sus acciones, sino además su inacción, cuando ella contribuye al bien común general.

Siempre habrá quienes lo hagan igual o mejor que nosotros, por lo que en el permanente avance de los tiempos, vendrán sí o sí por cierto, quienes nos sucedan.