Rechazo a la Reforma Tributaria: ¿solución o problema?

El rechazo de la idea de legislar la Reforma Tributaria es un hecho lamentable para nuestro país. Ese resultado, lejos de solucionar el tema tributario, lo complicó mucho más pues impide avanzar, perdiendo como sociedad la oportunidad de discutir y perfeccionar el sistema. Si bien es cierto los distintos sectores hacen mención a que se debe buscar una solución denominada “pacto tributario” o bien formar una “Comisión de Expertos”, con esto queda más que claro que las discusiones recurrentes generan incertidumbre en los mercados y grandes costos para ajustar los sistemas tributarios.

Habiendo pasado poco más de una semana del rechazo a la reforma, discutir acerca del contenido del proyecto ya no tiene sentido y varias voces han señalado que hay algunos temas que no deberían incluirse en un nuevo proyecto, siendo estos el impuesto al patrimonio y el impuesto a las utilidades retenidas. 

Si bien es cierto la necesidad de obtener recursos es fundamental para cumplir con los compromisos de gasto del Estado para financiar, por ejemplo, la Pensión Garantizada Universal, esto no puede hacerse únicamente desde la mirada recaudatoria, sino que debe incorporar enfoques tan fundamentales como son la promoción de la inversión y el desarrollo de los negocios, además de otros temas relevantes como el combate a la elusión y la evasión, siendo estas medidas realmente urgentes ya que las cifras indican que éstas podrían representar incluso un 4% del PIB.

Finalmente, lo importante es que hay bastante consenso en que Chile necesita una Reforma Tributaria, pero aún así es necesario el diálogo y un grado de flexibilidad por parte de todos los actores con el objetivo de llegar a un acuerdo duradero. Lo ocurrido debería abrir una oportunidad para negociar ese pacto, con el objetivo de generar ingresos y estabilidad al sistema tributario chileno.